Un abonado a todas las preselecciones formativas de su camada desde los 14 años, el entrerriano Mateo Díaz sueña con jugar su segundo Mundial con Argentina. Tras la experiencia en 2018 dando un año de ventaja, ahora apunta los cañones al Mundial U19 de Letonia para poner broche de oro a un ciclo de competencias formativas internacionales que se vio diezmado por la pandemia.
Mientras tanto, disputa el tramo final de la temporada en España, donde integra un CB Breogán de gran temporada y con aspiraciones al ascenso a la Liga Endesa, un objetivo difícil pero posible. Actualmente está disputando los cuartos de final al mejor de tres encuentros (la serie está 1-1), en busca del único boleto a la elite del básquet español.
Por compromisos de calendario, Mateo todavía no se ha podido sumar a las concentraciones de la Selección U19, espera hacerlo al terminar su temporada. En charla con Prensa CAB dejó sus sensaciones del certamen ecuménico que se viene.
-¿Hay tiempo para pensar en el Mundial o estás con la cabeza en otra cosa?
-Sí, lo uso como motivación. Es uno de los torneos más importantes de formativas. Hablo con mis compañeros que están en la concentración. Apenas llegué acá, le pregunté a mi agente por fechas y por qué iba a pasar con el Premundial, que al final no se hizo. Sería algo lindo volver a jugar con ellos, porque son amigos, hemos estado juntos en muchas preselecciones. Es lindo estar entrenando y compartiendo en el Cenard. Pero bueno, si todo sale bien, llegaría para la tercera concentración que es el mes que viene.
-Tuviste a Daniel Farabello en Sport Club y en la Selección ¿cómo es esa relación?
-Muy bien. Lo conocía desde antes porque él había jugado con mi padre. La primera vez que lo tuve como entrenador fue en el torneo de Turquía U16 y al otro año me sumé a Sport Club. Fue un muy buen base así que pude aprender muchas cosas de él. Lo volví a ver en el 2019 para el Sudamericano. Lo considero un gran entrenador y me ha ayudado mucho en mi formación.
-¿Cómo tomaste el año sin competencia con la Selección?
-Fue muy duro no jugar el Premundial. Ahí te medís y sabés como estás como equipo y como estás vos y tus compañeros individualmente después de un año sin verse. Teníamos mucha incertidumbre pero no quedaba otra que esperar a ver qué se decidía y quién iba al Mundial. Cuando me enteré que íbamos nosotros, me puse muy contento. Pensé que iba a ir el campeón de Sudamérica y nos íbamos a quedar afuera. Pero como se hizo por ránking, entramos.
-A pesar de no haber competido en todo el año pasado y que hace tanto tiempo que no se ven, ¿cómo se sienten como grupo?
-Somos un grupo unido. Me intriga ver el progreso de los chicos. Hay muchos que están jugando la Liga Nacional y también en un equipo de Federal, que está bueno. Quiero saber cómo han mejorado, eso es importante, porque tampoco se acaba acá. No es que si quedás afuera los 12 o si entrás pero te va mal y se termina todo. Al contrario, recién estamos empezando.
-Daniel Farabello dijo que es un equipo con muchas variantes en el perímetro, ¿cómo lo ves vos?
–Es una camada muy pareja, con un juego exterior muy bueno. Eso está bueno porque sabés que nadie te va a regalar nada y tenés que dar el máximo todos los días para quedar porque el que está al lado puede hacerlo igual o mejor que vos. Ser un equipo profundo ayuda mucho, sobre todo en estos torneos que tienen muchos partidos en pocos días. Hay muchos jugadores buenos que han tenido protagonismo con sus equipos de mayores y eso ayuda mucho.
-¿Qué esperás de este Mundial, qué aprendiste del anterior?
-Conocemos a los rivales, sabemos algo de las posibles plantillas de los equipos, pero no nos queda otra que dar el máximo. Aprendí que no podés aflojar no importa quién te toque enfrente. En el 2018 tuvimos un poco de mala suerte en el cruce con Montenegro y ahí tuvimos que jugar la reclasificación. Pero la experiencia es muy linda. Recordás los partidos y los querés volver a jugar. Quisiera aprovecharlo al máximo, disfrutar, aprender. Ver los otros equipos, los otros jugadores. En el 2018 jugamos contra Francia y algunos de esos chicos están ahora en la NBA y eso está para disfrutar.